Nadie puede hacerte más micromanagement que tú misma cuando empiezas a hacer dietas.
La newsletter de hoy va abierta para que puedas compartirla con esa persona a la que le vendría muy bien leer esto hoy.
En la newsletter de hoy:
🛒 ¿Ir al súper te estresa más que antes?
⚖️ Qué significa realmente comer de forma saludable
🧠 ¿Y si pudieras confiar en ti misma sin seguir reglas rígidas?
Ir al supermercado se ha convertido en un paseo por la biblioteca, y si no es ChatGPT el aliado, pues es cualquier buscador o app que nos diga si lo que queremos llevar en el carrito está “bueno” o “malo” para nuestra salud.
Antes que nada, quiero aclarar que no, esta no es una queja. Es más, me parece muy bien que queramos hacer pequeños cambios y elegir de manera consciente. El problema está en de dónde proviene la motivación de esto.
¿Es porque quieres sentirte mejor o porque estás descubriendo nuevas formas de establecer reglas invisibles que rigen la manera en que ves ciertos alimentos?
Piénsalo.
Bueno, para empezar, quiero partir desde la idea de lo que es “saludable” y lo que no...
No, “saludable” no significa bajo en azúcares, calorías o empacado con X cantidad de proteína… Realmente significa darle a tu cuerpo lo que necesita: nutrientes, energía y simplicidad.
Obsesionarte con los macros, limitar tu consumo de grasas y carbohidratos —peor aún, reemplazar comida real con polvos y etiquetas light— solo te aleja de la verdadera estrategia sostenible… que es elegir calidad sobre cantidad.
Es la forma en la que vivimos la que nos está llevando a sentirnos mal. Y, claramente, con ella, las elecciones que hemos normalizado.
Por eso te invito a abrirle la puerta a la idea de que puedes vivir de manera saludable y feliz en la zona gris.
👉🏼 No tienes que empezar una dieta para comer bien.
👉🏼 No tienes que empezar una dieta para dejar de comer impulsivamente.
(Al contrario, la dieta te hará comer más compulsivamente.)
Dígase dieta en: etiquetar alimentos como buenos y malos… permitirlos solo ese gran día de “cheat meals”…
👉🏼 Y la última verdad: no tienes que empezar una dieta para controlar tu peso.
PUEDES tener todos los alimentos permitidos y no comértelos sin control.
PUEDES darte permiso incondicional para comer y no comer en exceso.
PUEDES elegir comer lo que realmente te gusta sin “engordarlo” todo.
Es importante recordar que no hay una manera “perfecta” de alimentarse. La verdad es que un día o un antojo que no cumpla con estándares idealizados no compromete tu salud ni define tu bienestar.
Lo importante es conocer cómo te sienta lo que eliges comer, sentirte en conexión con tu cuerpo, y mejorar la relación que tienes con la comida y contigo misma.
Entonces, la próxima vez que vayas al súper, pregúntate:
¿Esto que pongo en mi carrito me sienta bien, me nutre, o lo estoy eligiendo porque cumple todas esas reglas invisibles que lo hacen “bueno”?
Si hoy decides dar un paso más adelante y empezar a trabajar en tu relación con la comida, te invito a que pruebes mi programa de 12 semanas. En The Peace Method Program te acompaño semana a semana, enseñándote a de dejar de sentirte fuera de control con la comida.
Nos vemos la próxima,
Isa